Examen y Tratamiento para la Hipertensión

Nuestros proveedores expertos y profesionales pueden ayudarlo a diagnosticar y tratar la hipertensión

La hipertensión, o presión arterial alta, es una afección crónica común pero grave. La mayoría de las person

as con presión arterial alta no notan ningún síntoma, lo que significa que pueden pasar sin tratamiento hasta que eventualmente desarrollen un gran problema de salud

importante. Un examen físico anual es una de las mejores formas de controlar la presión arterial para que podamos diagnosticar la hipertensión de manera temprana  e iniciar el tratamiento.

Acerca del Programa de Hipertensión

Dado que hay muy pocos síntomas de presión arterial alta, LCH es diligente en las pruebas y la educación del paciente. Muchos de nuestros pacientes tienen factores de riesgo comunes para la hipertensión, por lo que nos enfocamos tanto en la prevención como en el manejo de esta afección crónica.

Los pacientes pueden visitar cualquiera de nuestros centros de salud en Kennett Square y Oxford para que se les realice la prueba de presión arterial y para obtener más información sobre la prevención y el control de la hipertensión.

LCH trata regularmente a personas diagnosticadas con hipertensión. Nuestro equipo trabaja en estrecha colaboración con los pacientes para asegurarse de que comprendan su medicamentos para la hipertensión, sepan cómo reconocer síntomas inusuales y realicen cambios en el estilo de vida que mejoren naturalmente la presión arterial.

Pruebas Clave para el Diagnóstico y Control de la Presión Arterial Alta en LCH

La mayoría de los adultos han tenido muchas pruebas de presión arterial. Al comienzo de una cita, su enfermera le colocará un brazalete alrededor del brazo y apretará una pequeña válvula mientras escucha su corazón y mira el segundero de un reloj.

Esta prueba muy simple nos brinda la medición sistólica sobre diastólica de su flujo sanguíneo. La enfermera registrará su número para que el médico lo revise. La presión arterial cambia según su actividad, posición durante la prueba e incluso la hora del día. Una sola prueba de presión arterial no es suficiente para diagnosticar la hipertensión. Pero si tiene presión arterial alta en el momento de su prueba, nuestro equipo le recomendará los siguientes pasos.

Las pruebas adicionales pueden incluir:

• Pruebas de presión arterial en nuestra oficina o en casa varias veces durante unos días o semanas
• Análisis de sangre y orina
• Monitoreo básico del corazón con un estetoscopio o un ecocardiograma utilizando una máquina de ultrasonido
• Examen ocular para detectar efectos de la presión arterial alta detrás de los ojos

Nuestro equipo recomendará pruebas basadas en sus factores de riesgo y otras condiciones que tenga o pueda tener.

Preparación para las Pruebas de Presión Arterial Alta

La presión arterial fluctúa a lo largo del día según la última vez que comió, su nivel de actividad, si tiene estimulantes como cafeína o nicotina en su sistema, e incluso si tiene que ir al baño o no. La mejor manera de prepararse para su prueba de presión arterial es relajarse lo más posible.

Le recomendamos que evite comer, fumar o tomar café durante al menos media hora antes de su cita. Use el baño antes de su prueba y trate de relajarse durante unos minutos antes de que sea colocado el brazalete. El médico le pedirá que se siente con ambos pies apoyados en el suelo y que relaje los brazos. Siempre revise sus medicamentos con nuestro equipo antes de su prueba para que sepamos si tendrá efecto o no.

La hipertensión es el término médico para la presión arterial alta crónica. La presión arterial es la forma en que medimos la fuerza de la sangre que fluye a través de las arterias.

El cuerpo funciona mejor cuando la sangre se mueve a ritmo determinado. Cuando la sangre se mueve con demasiada fuerza, comienza a dañar las paredes de las arterias, lo que luego provoca cicatrices. A medida que las cicatrices se acumulan, la sangre tiene más dificultad para circular y aumenta el riesgo de ataque cardíaco y derrame cerebral.

La presión arterial está compuesta por dos medidas:

La presión sistólica es la fuerza de la sangre durante un latido del corazón (contracción del corazón).

La presión diastólica es la fuerza de la sangre entre los latidos del corazón (corazón relajado).

Los médicos explicarán estas medidas como un número sobre el otro. Una presión arterial saludable es aproximadamente de 120 sobre 80. La presión arterial alta es cualquier valor superior a 140 sobre 90.

Los factores de riesgo más comunes para la presión arterial alta son la genética, la obesidad, el abuso de sustancias, la diabetes tipo 2 y las enfermedad de la tiroides. Algunas personas desarrollan presión arterial alta sin ningún factor de riesgo. Dado que no hay síntomas evidentes y la presión arterial alta puede afectar a cualquier persona, la mayoría de los médicos controlan la presión arterial en cada cita de rutina.

Además del mayor riesgo de ataque cardíaco y derrame cerebral debido a la obstrucción de las arterias, la hipertensión también está relacionada con daño o enfermedad renal. Los problemas de salud que ocurren cuando alguien tiene presión arterial alta pueden poner en peligro la vida.