Los problemas de conducta, a veces llamados trastornos del comportamiento ocurren tanto en niños como en adultos. Estos problemas pueden afectar gravemente la salud mental de una persona, sus habilidades sociales y su autoestima. También pueden afectar a los familiares de la persona que padece el trastorno del comportamiento.

Los problemas de conducta suelen empezar aparecer en niños pequeños y adolescentes. Se puede hacer mucho para tratar estos trastornos, permitiendo que los jóvenes vivan vidas más felices y saludables. Algunos signos de que un niño puede tener un trastorno de conducta incluyen comportamiento disruptivo, berrinches o su mal comportamiento en general.

Si se abordan de manera oportuna, especialmente en la primera infancia, mediante psicoterapia, terapia familiar u otras modalidades, los niños pueden adaptarse y prosperar a medida que crecen hasta convertirse en adultos.

En este artículo, revisaremos algunos de los tipos más comunes de problemas de conducta y las formas de manejarlos.

• Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH)

Los niños y adultos que muestran signos de falta de atención durante largos períodos de tiempo son hiperactivos o incluso impulsivos, podrían estar experimentando trastorno por déficit de atención con hiperactividad o TDAH. Afortunadamente, las opciones de atención médica para el TDAH han mejorado drásticamente en las últimas décadas.

Las personas que experimentan TDAH pueden mostrar comportamientos agresivos o impulsivos, a veces actuando de manera distraída u olvidadiza.

Aunque el TDAH no se puede curar por completo, existen planes de tratamiento disponibles para quienes experimentan los síntomas. Una terapia increíblemente efectiva es la terapia cognitivo-conductual (TCC), cuyo objetivo es reconfigurar la forma de pensar y actuar. Además, dependiendo de la persona, el manejo de la ira puede ser una forma útil de tratamiento. También hay varios medicamentos disponibles, como estimulantes y medicamentos que mejoran las funciones cognitivas. Trabaje con un profesional de salud mental especializado en TDAH para encontrar el mejor tratamiento para usted o su ser querido.

• Trastorno de Oposición Desafiante (TOD)

Si un niño desobedece a las figuras de autoridad o es extremadamente desafiante, puede tener trastorno de oposición desafiante. Los niños con esta condición de salud mental pueden mostrar signos de comportamiento agresivo, irritabilidad y comportamiento discutidor.

El TOD puede ser causado por la genética simple y el entorno del niño. Si carecen de apoyo, tienen reglas disciplinarias inusuales o experimentan negligencia y abuso, puede llevar al TOD.

Dependiendo de la gravedad del comportamiento del niño, hay diferentes opciones terapéuticas que pueden ser útiles, como la terapia cognitivo-conductual, la terapia grupal o la terapia familiar.

• Trastorno de Conducta

El trastorno de conducta afecta a niños y adolescentes, y puede ser causado por una serie de factores, incluidos la negligencia o el abuso, lesiones cerebrales traumáticas o factores genéticos. Mientras que las personas con TOD son desafiantes porque hay una figura de autoridad diciéndoles qué hacer, las personas con trastorno de conducta simplemente actúan de manera agresiva o desafiante porque disfrutan de los factores de riesgo.

Las personas con trastorno de conducta a menudo muestran una agresión intensa hacia las personas y los animales, destruyen propiedades y mienten de manera constantemente. Al igual que la mayoría de los trastornos de comportamiento disruptivo, el trastorno de conducta se puede tratar con psicoterapia individual, psiquiatría adolescente y terapia cognitivo-conductual.

• Trastorno Obsesivo-Compulsivo (TOC)

Las personas con trastorno obsesivo-compulsivo (TOC) presentan pensamientos obsesivos y comportamientos repetitivos. El TOC puede generar mucho miedo, a veces en torno a los gérmenes o cómo organizar ciertos objetos.

En el día a día, el TOC puede manifestarse como comportamientos repetitivos, impulsividad, aislamiento social y, en algunas ocasiones, depresión o ansiedad. Si no se trata, el TOC puede afectar gravemente la salud mental y la conectividad de una persona con el mundo exterior.

Algunos medicamentos pueden ser útiles para las personas con TOC, así como tratamientos terapéuticos como grupos de apoyo, terapia de comportamiento emocional y terapia cognitivo-conductual.

• Trastornos de Ansiedad

Los trastornos de ansiedad son cada año más comunes. Las personas con trastornos de ansiedad experimentan una cantidad extrema de preocupación, estrés y miedo. Estos sentimientos pueden interferir con su vida cotidiana.

Existen algunos tipos de trastornos de ansiedad, como el trastorno de ansiedad generalizada, las fobias, el trastorno de ansiedad social y el trastorno de pánico. Existen autotratamientos para los trastornos de ansiedad, que incluyen reducir el consumo de alcohol y cafeína, hacer ejercicio regularmente y usar técnicas de relajación como la meditación.

Más allá del autotratamiento, las personas con trastornos de ansiedad también pueden encontrar apoyo en terapia y los medicamentos.

• Trastornos Relacionados con Traumas y Factores Estresantes

Los trastornos relacionados con traumas y factores estresantes incluyen el trastorno de estrés postraumático (TEPT) o el trastorno de estrés agudo. Las personas que experimentan este tipo de trastornos suelen tener pensamientos intrusivos, comportamientos evasivos y comportamientos nerviosos. Pueden irritarse fácilmente y mostrar comportamientos autodestructivos.

El tratamiento para este tipo de trastornos varía, pero puede incluir terapias como la terapia cognitivo-conductual o la terapia de desensibilización y reprocesamiento por movimientos oculares (EMDR). Al igual que con otros trastornos, la terapia grupal y los grupos de apoyo pueden ser útiles para las personas que experimentan trastornos relacionados con el trauma o el estrés.

• Trastornos del Estado de Ánimo

Los trastornos del estado de ánimo son trastornos de comportamiento que causan cambios severos en el estado de ánimo. Los trastornos del estado de ánimo más comunes son la depresión y el trastorno bipolar. Los adultos y los niños pueden verse afectados de manera diferente por los trastornos del estado de ánimo. Los niños tienen más probabilidades de experimentar síntomas físicos, como dolores de cabeza o de estómago, mientras que los adultos pueden sentirse más desanimados o tristes en general y mostrar más síntomas mentales.

Los trastornos del estado de ánimo se pueden tratar con medicamentos, como antidepresivos o estabilizadores del estado de ánimo, y pueden funcionar aún mejor cuando se realizan con una intervención terapéutica adecuada.

• Problemas de Conducta Relacionados con el Abuso de Sustancias

El abuso de sustancias, incluidas las drogas y el alcohol, a menudo puede provocar o empeorar problemas de conducta. Las personas con trastorno por consumo de sustancias pueden experimentar irritabilidad, impulsividad, ira, agresividad o retraimiento de los entornos sociales.

Los problemas de conducta, como la ansiedad o la depresión, pueden llevar al abuso de sustancias y, viceversa, el abuso de sustancias puede aumentar los problemas de conducta. El abuso de sustancias puede alterar el cerebro, lo que puede causar cambios de humor, comportamientos agresivos y deterioro del juicio.

Para quienes buscan ayuda, la Administración de Servicios de Salud Mental y Abuso de Sustancias (SAMHSA) tiene una línea de ayuda que puede ofrecer opciones de tratamiento y orientarle sobre los próximos pasos. Además, existen centros de recuperación y terapeutas en todo el país listos para apoyar a las personas con trastornos por abuso de sustancias.

Estrategias de Manejo para Padres y Cuidadores 

Los familiares y cuidadores de personas con problemas de conducta también necesitan apoyo. Lo más importante que pueden hacer los cuidadores es cuidarse a sí mismos primero; de lo contrario, podrían agotarse por cuidar únicamente a aquellos en sus vidas con problemas de conducta.

Los cuidadores también deben enfocarse en una comunicación clara con la persona que tiene problemas de conducta. Esto minimiza la oportunidad de reacciones explosivas y también modela una comunicación saludable para ellos, ya que esto puede no ser algo natural.

También es importante encontrar personas que le apoyen—familia, amigos, grupos de apoyo, etc. Poder confiar con personas fuera de la persona a la que cuida será increíblemente importante para su salud a largo plazo.

Obtenga Apoyo y Tratamiento de Salud Mental en LCH

Los problemas de conducta pueden afectar a personas de todas las edades, por lo que es importante comprender el panorama de los trastornos y abordarlos de frente. Hay muchos recursos disponibles para ayudar con los problemas de conducta.

Si usted o alguien que conoce necesita apoyo, LCH está aquí para ayudarle. El apoyo para los problemas de conducta puede cambiar su vida.